Fórmulas educadas para evitar al final del correo electrónico

Oraciones inútiles, fórmulas negativas, abreviaturas o acumulación de fórmulas… Son todos usos al final del correo electrónico que merecen ser abandonados. Ganará mucho si se involucra más en las fórmulas al final del correo electrónico. Es el logro de los objetivos lo que motivó la elección de escribir un correo electrónico. Si eres un empleado de oficina o alguien que envía correos electrónicos regularmente para trabajar, este artículo es para ti. Seguramente mejorará su arte de la correspondencia.

Algunos ejemplos de fórmulas por las que no debes optar

Es importante deslizar un fórmula de cortesía al final de un correo electrónico, pero no cualquiera.

Fórmulas comunes o compuestas por oraciones innecesarias

Terminar un correo electrónico profesional con una fórmula atractiva ofrece al remitente la garantía de ser leído y de hacer saber al destinatario lo que se espera de él. Sin embargo, al adoptar una frase cortés muy estereotipada como: "Quedando a su disposición para cualquier información adicional ...", existe una gran posibilidad de que no se lea. De hecho, es bastante común.

También se deben evitar las expresiones corteses al final del correo electrónico compuestas por oraciones innecesarias. No solo no agregan valor al mensaje, sino que parecen carecer de sentido y pueden desacreditar al remitente.

Fórmulas negativas

Más allá del contexto editorial, varios estudios establecen que las formulaciones negativas tienen un impacto en nuestro subconsciente. Más bien, presionan para cometer lo prohibido en lugar de evitarlo. Como resultado, expresiones amables como "Llámame" o "No dejaremos de ..." son muy poco atractivas y, lamentablemente, pueden tener el efecto contrario.

Fórmulas en forma acumulativa

La abundancia de bien no hace daño, dicen. Pero, ¿qué hacemos con esta máxima latina “Virtus stat in medio” (Virtud en el término medio)? Baste decir que las fórmulas de cortesía pueden elegirse en contexto, cuando se acumulan, pueden volverse rápidamente inoperantes.

Por lo tanto, deben evitarse expresiones de cortesía como "Hasta pronto, que tenga un buen día, cordialmente" o "Muy buen día, Respetuosamente". Pero entonces, ¿qué forma de cortesía adoptar?

En su lugar, opte por estas expresiones educadas

Cuando esté esperando una respuesta de su corresponsal, lo ideal es decir: "Pendiente de su devolución, por favor ...". Otras expresiones de cortesía para mostrar su disponibilidad, "Por favor sepa que puede contactarnos" o "Lo invitamos a contactarnos".

Las expresiones amables como "Amistad" o "Que tenga un buen día" deben utilizarse cuando ya esté acostumbrado a comunicarse con el destinatario.

En cuanto a las expresiones de cortesía "Atentamente" o "Muy cordialmente", son adecuadas para situaciones en las que previamente hayas discutido varias veces con tu interlocutor.

Respecto a la educada fórmula "Atentamente", debes saber que es bastante amistosa y formal. Si nunca ha conocido al destinatario, esta fórmula aún se puede utilizar de forma válida.